Los poetas malditos

Abstract:

 

The cursed poets since they made their appearance in 1884, have always been a focus of controversial and long conversations, both for their special characteristics when composing their poetry, and for the disorderly and unconventional life they lived, having a way of understanding life very different from that of their contemporaries. They found beauty in things and themes that would make many people flee from them, as they could not find anything beautiful to highlight in the most desperate and sad situations.

In this work we are going to see some brushstrokes of what the cursed poets were and, of the current that was formed from them, the Malditism.

 

Resumen documental:

 

Los poetas malditos desde que hicieron su aparición en 1884, siempre han sido un foco de controvertidas y largas conversaciones, tanto por sus especiales características a la hora de componer sus poesías, como por la vida desordenada y al margen de lo convencional que vivieron, teniendo una manera de entender la vida muy diferente a la de sus contemporáneos. Encontraban la belleza en cosas y temas que harían huir de ellas a muchas personas que no podrían hallar nada bello que destacar en las más desesperanzadas y tristes situaciones.

En este trabajo vamos a ver unas pinceladas de lo que fueron los poetas malditos y, de la corriente que se conformó a partir de ellos, el malditismo.

 

Keywords

Poet, cursed, bohemian, hopelessness, life, France, poetry death, beauty.

 

Palabras clave

Poeta, maldito, bohemio, desesperanza, vida, Francia, poemario, muerte, belleza.

 

1.- Sobre originales y no originales

 

Dentro de la historia mundial ha habido algunas ocasiones en que no ha pasado a la misma la versión original y primigenia de algún acontecimiento o suceso, sino una versión alternativa, quedando la original encajada en los recovecos del olvido, consolidándose históricamente una versión modificada, adulterada o alternativa que no es fiel a esos acontecimientos o sucesos originales, sustituyendo esta versión alternativa a la historia real y original, siendo tomada además, como la válida para todos los supuestos.

Como vamos a comprobar, algo similar a lo expuesto es lo que le ocurrió al colectivo original de los «poetas malditos», pues no todos los poetas malditos que han trascendido a la historia y al imaginario popular, fueron los originales poetas malditos. Quedando algunos de los poetas malditos originales, totalmente acomodados en un olvido del cual sólo se les rescata en algún trabajo específico como pueda ser este.

Esto me lleva a puntualizar que no es un olvido total sino parcial. Un pasar a un segundo plano donde habita lo desconocido por la mayoría.

 

 

2.- El origen

 

Dentro del ámbito de la poética mundial ha habido multitud de movimientos, corrientes, vanguardias, generaciones y otras maneras de agrupar a un colectivo de poetas con unas características singulares que hacen de ellos un conjunto de poetas unidos por algún rasgo identificador como bien pueda ser, una manera concreta de escribir o de entender la vida siguiendo alguna corriente literaria; unas fechas próximas de nacimiento; unos mismos valores éticos, sociales y/o morales; u otras diferentes características.

Mas, hay por lo menos dos grupos de poetas relevantes históricamente, los «Novísimos» y los «Poetas Malditos», que surgieron simplemente de las páginas de un libro que los unió y les asignó un nombre identificador como colectivo.

Y aunque se pueda pensar que por este motivo no tienen nada en común, salvo el hecho de haber coincidido en ese libro, la verdad es que no es así, pues ambos colectivos de poetas tienen unos rasgos especiales e identificativos.

 

 

3.- Los Novísimos

 

Los Novísimos, surgieron de un poemario antológico creado por el crítico literario, escritor y editor José María Castellet (1926-2014), que tituló Nueve novísimos poetas españoles. Esos poetas fueron:

 

José María Álvarez (1942-2024)

Félix de Azúa (1944)

Guillermo Carnero (1947)

Pere Gimferrer (1945)

Antonio Martínez Sarrión (1939-2021)

Ana María Moix (1947-2014)

Vicente Molina Foix (1946)

Leopoldo María Panero (1948-2014).

Manuel Vázquez Montalbán (1939-2003)

 

Pero este colectivo de poetas no es el alma mater de este artículo. Así que nos centraremos en el segundo colectivo citado, los Poetas Malditos.

 

 

4.- Los Poetas Malditos

 

La nómina inicial de los denominados «Poetas Malditos», surge en Francia al amparo de un libro titulado «Les poètes maudits» («Los poetas malditos»), publicado por primera vez en 1884, siendo su antologista el poeta Paul Verlaine (1844-1896). Cuatro años más tarde, en 1888, se publicó una nueva edición con treinta y cinco nuevas composiciones.

Paul Verlaine aun siendo el antologista del libro, se incluyó entre los seis poetas antologados, pero no utilizó su verdadero nombre sino un anagrama del mismo «Pauvre Lelian», (en español se traduciría como «Pobre Lelian»), seguramente para que pasara desapercibido el hecho de que el poeta antologista se auto antologara. Esta práctica de auto antologarse el antologista de un libro, es más usual de lo que pueda parecer.

Los poetas malditos antologados inicialmente en 1884 fueron:

 

Marceline Desbordes-Valmore (1786-1859)

Auguste Villiers de L’Isle-Adam (1838-1889)

Stéphane Mallarmé (1842-1898)

Pauvre Lelian, anagrama de Paul Verlaine (1844-1896)

Tristan Corbière (1845-1875)

Arthur Rimbaud (1854-1891)

 

Lo primero que destaca de estos nombres, es que la única mujer que hay entre ellos, Marceline Desbordes-Valmore, nació cincuenta y dos años antes que el siguiente poeta maldito que fue Auguste Villiers de L’Isle-Adam. Además, la poeta maldita murió cuatro años después de que naciera el más joven de los restantes poetas malditos, Arthur Rimbaud, constituyendo esto un gran desfase en años para poder incluir en la antología a Marceline Desbordes-Valmore.

Además, dos de los poetas malditos incluidos en el libro, Tristan Corbière y Marceline Desbordes-Valmore, lo fueron a título póstumo.

En este ensayo-poemario antológico realizado por Paul Verlaine Los poetas malditos, fue donde por primera vez él mismo califica a los seis componentes del libro como «poetas malditos», iniciando, seguramente sin pensar él que así sería, el movimiento denominado «malditismo», un movimiento en el que posteriormente han ido agregando muchos más poetas de toda la historia de la poética mundial, aun con más o menos acierto en su elección, dejando esto la puerta abierta a que se pueda discrepar del «malditismo» de algunos de ellos. Algunos de los nuevos poetas malditos han sido:

 

François Villon (1431 o 1432-1463)

William Blake (1757-1827)

Gerard de Nerval (1808-1855)

Edgar Allan Poe (1809-1849)

Charles Baudelaire (1821-1867)

Charles Cros (1842-1888)

Conde de Lautréamont (1846-1870)

Germain Nouveau (1851-1920)

Antonin Artaud (1869-1948)

Paul Valéry (1871-1945)

Rainer Maria Rilke (1875-1926)

Federico García Lorca (1898-1936)

Charles Bukowski (1920-1994)

Alejandra Pizarnik (1936-1972)

Rodolfo Enrique Fogwill (1941-2010)

Roberto Bolaño (1953-2003)

 

Mas, de entre todos los nuevos poetas malditos que se han ido añadiendo a la nómina de estos, destaca con luz propia Charles Baudelaire, el cual se ha constituido como el poeta maldito por excelencia, a pesar de no haber sido uno de los seis originales poetas malditos incluidos en la antología promovida por Paul Verlaine.

Sobre este extremo, es importante saber que, Paul Verlaine para su libro, tomó la idea de ser «poetas malditos», de un poema de Charles Baudelaire titulado «Bendición», el cual es tremendamente desgarrador y quizá de una lectura no aconsejada para todas las personas.

El poema «Bendición» fue publicado en el que se ha constituido como el poemario más destacado de Charles Baudelaire Las flores del mal, publicado en 1857.

En el momento de su publicación, este poemario fue censurado por «ofender a la moral y a las buenas costumbres», y esto desató una gran polémica alrededor de Charles Baudelaire.

Tras lo dicho, es preceptivo conocer las dos estrofas del poema «Bendición», en el que aparece la palabra «maldito», tanto en versión masculina como femenina. Las estrofas en cuestión son la segunda y la cuarta.

 

Estrofa segunda.

 

-«¡Ah! ¡no haber parido todo un nudo de víboras,

Antes que amamantar esta irrisión!

¡Maldita sea la noche de placeres efímeros

En que mi vientre concibió mi expiación!

 

Estrofa cuarta.

 

¡Yo haré rebotar tu odio que me agobia

Sobre el instrumento maldito de tus perversidades,

Y he de retorcer tan bien este árbol miserable,

Que no podrán retoñar sus brotes apestados!»

 

Paul Verlaine en su antología hizo un breve comentario sobre cada uno de los poetas antologados que él mismo seleccionó, pero no lo hizo de manera objetiva, sino desde el plano de la opinión personal.

Paul Verlaine sobre sí mismo hablando en tercera persona dice en el libro Los poetas malditos:

 

Este Maldito sí que ha tenido el más melancólico de los destinos, y esta dulce expresión puede, en definitiva, caracterizar las desventuras de su existencia, hijas del candor de su carácter y de su irremediable debilidad de corazón […]

 

 

5.- Malditismo

 

Sobre esta corriente iniciada en el seno de un libro, no hay una única definición, pues según qué fuentes consultemos, nos encontraremos diversas definiciones y, si bien todas tienen algún elemento en común, también la mayoría presenta elementos propios.

En este sentido, quiero exponer la definición que de «malditismo», nos indica el diccionario de la RAE (Real Academia Española)

 

Condición de maldito (que va contra las normas establecidas).

 

Una definición muy simplista, siendo la definición que nos ofrece Leopoldo Trazegnies Granda (1941), en su Diccionario Literario Personal, bastante más acertada[1].

Una definición del malditismo que bien podría ser válida entre todas las que se puedan hallar sería esta.

Movimiento que aúna a poetas de vida bohemia que han sido incomprendidos por sus contemporáneos, situándose al margen de la moral de su época y, no habiendo obtenido el éxito esperado en vida aun con sus obras renovadoras y de cuidado estilo.

 

 

6.- El poeta maldito por excelencia. Charles Baudelaire

 

Aunque no fue uno de los poetas malditos originales recogidos en el libro Los poetas malditos, hay que recordar que una de sus poesías «Bendiciones», fue la que propició el nombre de «maldito» para los poetas de la antología de Paul Verlaine.

Además, su propia vida fue todo un despropósito desde la muerte de su padre siendo un niño, pasando por el abandono de su madre y su desordenada vida bohemia de adulto entre burdeles y prostitutas, hasta llegar a su dramática muerte debida a la sífilis. La vida de Charles Baudelaire, es un total estereotipo de lo que posteriormente se definió como poeta maldito. Su propia vida podría ser una gran definición de «malditismo». Esto fue motivo suficiente por el que aun no siendo uno de los originarios poetas malditos, ha encabezado la nómina de los mismos, pasando a ser el poeta maldito por excelencia.

Decir poeta maldito es sinónimo de decir Charles Baudelaire.

 

 

7.- Poetas malditos que desaparecieron de la lista oficial

 

De la nómina oficial que ha pasado a la historia como los poetas malditos, dos de los antologados originalmente se han quedado en el olvido, del cual tan sólo son rescatados para trabajos académicos o similares.

Estos dos poetas malditos son:

 

Marceline Desbordes-Valmore

Auguste Villiers de L’Isle-Adam

 

Incomprensiblemente, cuando se realiza una lista de los poetas malditos que se han ido incorporando a lo largo de la historia, estos dos poetas tampoco suelen aparecer.

Aun así, es preceptivo saber que, hay algunos libros que hablan sobre los poetas malditos, como lo hace Las bestias primitivas. Antología de los poetas malditos, publicado en 2023, en el que se incluyeron los seis originales poetas malditos, más Charles Baudelaire, aunando en un solo volumen, los site poetas que, bien hubieran podido conformar la primera nómina de los «poetas malditos».

Veamos qué decía Paul Verlaine en su libro Los poetas malditos, de los dos poetas que posteriormente han sido bastante olvidados por la historia.

 

Marceline Desbordes-Valmore

 

Hemos dicho que el lenguaje de Marceline Desbordes-Valmore era suficiente; debimos decir: muy suficiente; mas, tenemos tal purismo y pedantería que añadiremos a quien nos llame decadente […] que algunas ñoñerías, mas ninguna ingenuidad, pueden tropezar en nuestros prejuicios de escritor con miras a lo impecable.

[…] cabe hablar así de una parte de la obra de esta mujer adorablemente tierna, […]

 

Decir de esta poeta que incluyó como maldita, que fue «adorablemente tierna», y cosas similares, no son unas buenas credenciales para ser una poeta maldita, aunque en su matrimonio con Prosper Lanchantin-Valmore (1793-1881) tuviera una vida algo mezquina.

 

Conde Auguste Villiers de L’Isle-Adam

 

Aunque Villiers sea ya muy glorioso y aunque su nombre, destinado a la mayor resonancia, camina hacia una posteridad sin fin, no obstante, le incluimos entre los «Poetas malditos», porque no es lo bastante glorioso en esta época, la cual debería estar a sus pies.

 

Es preciso matizar que, al ser conde, en un principio lo aleja bastante de la idea de poeta maldito, como veremos más adelante según las características que debe tener todo poeta maldito. Nos encontramos ante un aristócrata de una familia venida a menos, al que Paul Verlaine le confirió el suficiente grado de «malditismo» para poder ser incluido en el libro.

 

 

8.- Características que deben poseer los poetas malditos

 

Desde la publicación del libro Los poetas malditos, a los seis poetas recogidos en él, se les denominó «malditos», y a su forma de ser, de vivir, de sentir y de actuar, se le denominó «malditismo».

Pero, además de saber qué es el malditismo, es imprescindible saber qué cualidades debe reunir un poeta, tanto en su obra como en su propia vida, para poder ser calificado como «maldito».

A continuación, se exponen una serie de directrices que debe cumplir un poeta para ser aceptado como poeta maldito. No están ordenadas por orden de importancia, sino tan sólo nombradas una tras otra.

 

 

8.1.- Ideología liberal

 

Ya no sólo en el plano estrictamente político, sino como una manera de vivir y entender la vida en la que se declaran ser libres a la hora de pensar y emitir juicios sin todos los prejuicios moralistas de la época en que les ha tocado vivir.

Este punto debe quedar sobradamente claro y expuesto en el discurso poético de sus poemas.

 

 

8.2.- Visión pesimista de la vida

 

Todo poeta maldito debe tener un sentimiento pesimista de la vida, plasmando muy patentemente en sus poemas, pues no se sienten comprendidos ni aceptados por sus iguales y por sus contemporáneos, llegando a desvincularse por completo de su sociedad y modo de vida de su entorno.

Se suelen identificar como verdaderos marginados, solitarios y, además, de ellos debe rezumar una amargura en todos o casi todos los aspectos, reflejada tanto en sus vidas como en su obra poética.

 

 

8.3.- Son rebeldes por naturaleza

 

Los poetas malditos rechazan la realidad que les ha tocado vivir, sintiéndose muy alejados de la misma, es por ello que se rebelan contra ella con todo cuanto le dictan sus particulares musas.

 

 

8.4.- Sus poemas son muy oscuros

 

Podría concluir que todos sus poemas están envueltos en un ámbito algo misterioso, triste, desesperado, trágico, desesperanzado, oscuro e incluso tenebroso. Con esta acción quieren reflejar su propia visión de la vida y su manera de vivir, bastante alejada de los convencionalismos de la sociedad que les ha tocado «padecer».

 

 

8.5.- Poesía trascendental

 

Un poco por todo lo antedicho, su poesía se viste con un traje trascendental y metafísico, al querer romper siempre con todo lo establecido en su momento actual, y hacerlo de una manera que raya lo idílicamente tétrico.

 

 

8.6.- Lenguaje cuidado

 

Todo lo antedicho no quiere decir que los poetas malditos fueran incultos o no supieran componer poesía e hicieran tan sólo lo que buenamente pudieran, no, en absoluto. Los poetas malditos cuidaron y han de cuidar su lenguaje hasta el punto de utilizar un registro formal y culto en numerosas ocasiones, a pesar de la desesperanza que emane de sus versos.

De entre todas las figuras retóricas utilizadas por este colectivo de poetas, quizá sea la metáfora, una de las más utilizadas.

También es preceptivo tener presente que, los originales poetas malditos fueron unos grandes simbolistas inmersos en la corriente denominada «Simbolismo», la cual tuvo en Charles Baudelaire y su libro Las flores del mal, uno de sus más claros exponentes. El Simbolismo también estuvo influido en un alto grado por el poeta Edgar Allan Poe.

 

 

8.7.- Belleza en su poesía

 

Hay que destacar que la belleza de sus poesías fue, y debe ser, una constante imprescindible entre todos los poetas malditos. Aunque la verdad es que esta belleza está muy alejada de los cánones tradicionales, clásicos y convencionales, creando nuevos cánones de belleza entre lo trágico y todo aquello que, en cierta manera, podría causar rechazo de manera habitual como pueda ser la muerte; el sufrimiento; los momentos más desgarradores y otros motivos y situaciones que, otros poetas no podrían llegar a ver, valorar ni entender.

 

 

8.8.- Haber fallecido

 

Aunque este punto no se podría considerar como algo imprescindible, sí que es cierto que los poetas malditos que se consideran como tales, todos han fallecido, pues una de las premisas para ser un poeta maldito, según la definición del malditismo, es que haya sido incomprendido por sus contemporáneos e iguales y, además, no haya obtenido en vida el éxito y reconocimiento que esperaba. Esto, evidentemente, nos conduce a que un poeta no será reconocido como «maldito», hasta después de haber fallecido, a pesar de que cuatro de los originales poetas malditos estaban vivos en el momento de la publicación del libro Los poetas malditos, donde fueron antologados.

Este punto deja fuera de la categoría de poeta maldito a muchos poetas vivos que aspiran a ser reconocidos como tales.

 

 

9.- Conclusión

 

Por todos los motivos expuestos, como su vida bohemia; su visión pesimista de la vida; su desesperación intrínseca ante todo, etc., era bastante habitual que los poetas malditos no fueran bien recibidos por sus contemporáneos y en vida, fueran dura y malamente criticados, pues iban totalmente en contra de todo cuanto en sus respectivos nichos históricos constituían las buenas maneras y los cánones de belleza y escritura, alejándose bastante de ellos y, proclamando una belleza especial y esencial en sus obras dentro del marco de lo desesperanzado y oscuro.

Las obras de los poetas malditos hay que leerlas con la mente abierta a cuanto podamos encontrarnos, pues algunos de los poemas de estos poetas, podrían herir la sensibilidad de algún lector altamente sensible.

 

 

Bibliografía

 

Libros

 

Nueve novísimos poetas españoles

José María Castellet. 1970 – Barral Editores.

Barcelona (España)

 

Las bestias primitivas. Antología de los poetas malditos

Varios autores. 2023 – Anverso Poesía.

España – México

 

Las flores del mal

Charles Baudelaire. 1857 – Puolet Malassis et de Broise

París (Francia)

 

Los poetas malditos

Paul Verlaine. 1884 – Léon Vanier.

París (Francia)

 

Diccionario Literario Personal

Leopoldo de Trazegnies Granda. 2023 – Ediciones de la Tortuga Veloz.

Sevilla (España)

 

La aventura sin fin

  1. S. Elliot – 2011. Penguin Random House Grupo Editorial España

Estados Unidos. La referencia es la obra publicada en España.

 

 

Webs

 

Wikipedia

https://es.wikipedia.org/wiki/Wikipedia:Portada

 

Diccionario en línea de la RAE (Real Academia Española)

https://dle.rae.es

[1] No puedo incluir la definición pues, el propio Leopoldo Trazegnies Granda prohíbe expresamente en su libro, que se comparta absolutamente nada de él sin permiso expreso.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

PAEC

La Contra 9: «El humo nos saldrá caro»

Estamos intentando mantener a raya la seguridad personal de nuestra  chavalada con más burocracia que la que se necesitaba para salir de la República Democrática Alemana. Para ir con los chiquillos a un

Cultura

La tradición Hagumo (Los Shizen)

El secreto mejor guardado de Japón. Poco han dejado los historiadores claro respecto a la cultura Hagumo conocida por los Yamato como los Shizen, “los

PAEC

La Contra 8: Refuerzo positivo

Creo que ni hay nadie en sus cabales que no considere la validez del “refuerzo positivo” y que en muchas ocasiones (ojo, no en todas,